LA ESPAÑA QUE QUEDARA

España demostró que es la mejor selección del mundo, no solo durante este Mundial, sino a lo largo de los últimos años.
El proceso español, según los entendidos, comenzó en la década del ’90, con la preparación de su selección de fútbol sub-23 para las Olimpiadas de Barcelona 1992 (medalla de Oro para la selección española), equipo donde destaco el joven mediocampista, y capitán, Pep Guardiola, quien también integraría el Barcelona dirigido por Cruyff ganador de la Copa de Campeones de Europa el mismo año ’92.
Es bien conocido el legado dejado por ese Barca de Johann Cruyff, de funcionamiento novedoso y osado para su tiempo, con el que gano 4 Ligas de España consecutivas. Así, el Barcelona ha intentado seguir el modo Cruyff por diferentes vertientes más o menos afortunadas (Van Gaal, en menor medida, Rijkaard, con éxito, y actualmente Guardiola, record en títulos), pero siempre exigiéndose esa forma de jugar. Se estableció un estilo de dominio dúctil e inclaudicable del balón, de precisamente y practica del exasperante (para el rival) “tiqui, taca”. Ese estilo, esa escuela podría decirse, fue adoptado por la selección española, que inicio en 2004 su ciclo al mando de Luís Aragonés, que con un Mundial digno (eliminado en cuartos por Brasil en 2006) y una Eurocopa histórica (campeón en 2008) dejo el mando de la selección a su sucesor Del Bosque., quien mantuvo la manera de jugar e inclusive a los jugadores.
Pero el fenómeno España no es solo esta porción de la historia aquí brevemente comentada: es también consecuencia de un largo proceso de “importación” de futbolistas extranjeros, posiblemente los mejores (Di Stefano, Puskas, Kubala, Cruyff, Kempes, Maradona, Hugo Sánchez, Laudrup, Romario, Bebeto, Ronaldo, Rivaldo, Zidane, Cristiano Ronaldo, Ronaldinho, Kaka, etc.) quienes han sido protagonistas de la Liga, convirtiéndola en la mas poderosa del mundo (incluso sobre la italiana e inglesa) y dejando consigo enseñanzas y experiencias que se fueron acumulando en ese intento de constituir un selección de elite.
Además, es también consecuencia de una creciente cultura futbolística local, empeño de instrucción por parte de sus directores técnicos, de sus periodistas, y de la propia afición; quienes a la par, han generado una industria sólida del conocimiento futbolístico: libros, estudios de táctica y de preparación de equipos, seminarios y cursos de especialización, además del marketing y la posibilidad de generar discusión técnico-táctica (también la llegada de los mas reconocidos Directores Técnicos). Un enriquecimiento autoabastecible que ha hecho del público español uno de los más entendidos en materia futbolística.
Hoy España esta a punto de coronar un sueño y, quizá, dejar su estilo entre los hitos técnico-tácticos de la historia de las Copas del Mundo. Pero, como todo equipo, es falible; y como todo gran equipo, admite diferentes interpretaciones. Los simpatizantes de la táctica, la polifuncionalidad y el pragmatismo relievan su defensa, su funcionamiento táctico, la prudencia de sus planteamientos, el trabajo de pelota parada (el gol de Puyol en semifinales); y los que nos adscribimos al deleite de ver la ductilidad hipnótica de Iniesta, Xavi, Xavi Alonso y cia.
Pase lo que pase en la final y diga lo que diga el pulpo Paul, la historia ya esta escrita.